Si queres poner una canción de fondo mientras leés esta carta, te recomiendo Rivers and Roads de The Head and the Heart Hola Reader, ¿Cómo estás? Por acá bien. ¡Siento que pasó un año desde la última vez que te escribí! Mayo fue un mes tan intenso como lleno de cosas hermosas y tengo tanto para contarte que no sé por dónde empezar. ¿Quizás en orden cronológico? La primera semana del mes arrancó en Barcelona, donde nos encontramos con mis compañeras de Mastermind Sofi, Caro, Sharon y Magu. Si bien tenemos videollamadas todos los meses y a todas las había visto en persona por separado, nunca habíamos estado las cinco juntas en el mismo lugar, por lo cual estaba en iguales partes entusiasmada y ansiosa. ¿Cómo va a ser la dinámica del grupo? ¿Me voy a sentir cómoda conviviendo? ¿Lo vamos a disfrutar? Para mi alivio, compartir con las chicas se sintió como estar con amigas de toda la vida y la energía fluía abundante, enorme, pura, hermosa. Todo lo que hicimos en Barcelona, desde compartir los primeros mates hasta dar nuestro primer taller juntas, se sintió natural, alineado y poderoso. Como si estuviéramos exactamente donde teníamos que estar. En el taller de Barcelona charlamos sobre lo que significa tener un grupo de Mastermind y compartimos los aprendizajes que nos dejó el nuestro, para después hacer una dinámica de speed dating en la que la gente podía conocerse y, si había match, armar su propio grupo de mastermind después (¡hubo match!). Todavía arriba por la energía del encuentro, la mañana siguiente nos subimos a un bus y partimos rumbo Lloret de Mar, en la Costa Brava española, para vivir un retiro creativo creado por y para nosotras. Y si la previa había sido mágica, este retiro fue directamente el material del que están hechos todos mis sueños. El hotel super cómodo, cada una tenía su propia habitación y estábamos muy cerquita del mar. En cuanto a la parte creativa del retiro, cada una aportó algo para la otra desde su experiencia y profesión: Caro guió mañanas de mindfulness y grounding, yo di un taller de hábitos y bullet journal, Sofi nos hizo un recorrido fotográfico por los Jardines de Santa Clotilde, Shari dio una masterclass de coaching y Magu nos regaló un workshop de arte. Un sueño. Y entre toda esa magia, muchas risas, charlas profundas, noches de vinito y oráculos en el balcón, ideas para nuevos proyectos juntas... Lo escribo y me emociono de nuevo. La vida muchas veces nos aleja de gente que alguna vez fue importante para nosotras (especialmente al migrar, que se hacen evidentes las distancias literales, pero también las metafóricas) y ver que tengo la posibilidad de crear nuevos vínculos profundos y reales desde el presente, me llena el alma. ¿No es hermoso entender que la vida no se termina a los 30, sino que empieza todo el tiempo? Siempre tenemos la opción de anclarnos a lo que ya no es, o de entregarnos con el corazón abierto a todo lo que puede llegar a ser si le damos permiso. Este mes, le di un montón de permiso. ¡Y esto es solo la primera semana! Entre la segunda y la tercera semana de mayo vinieron mis padres de visita a Berlin, un tipo de amor infinito que siempre reconforta recibir. Compartimos mates, salimos a caminar, comimos en lugarcitos lindos, paseamos en barco y hasta me acompañaron a comprar zapatos para mi casamiento, tarea que sola me pesa un montón (son una prenda que no me entusiasma para nada: borcegos, zapatillas, sandalias o descalza). La cuarta semana de mayo me subí a un tren rumbo a Aarhus, Dinamarca, a visitar a mi amiga Nahi. Nunca había estado en ese país y me encantó, todo es tan perfecto que me dio la sensación que quien nace ahí ya tiene una ventaja enorme en la vida en cuanto a armonía, balance y salud mental( lo googleé y es efectivamente así, Dinamarca es el segundo país más feliz del mundo después de Finlandia y justito antes que Islandia.) En ese viaje compartí muchas conversaciones con Nahi, caminé por la ciudad, compré pavaditas, comí rico, me junté a charlar con Tais (hermosa persona, primero, y periodista argentina de cambio climático, después), visité ARoS (un museo de arte que me voló la cabeza), conocí el campus de Lego y toqué ciervos por primera vez en mi vida. Todo lindo. La quinta semana de mayo (y la perra seguía y seguía), después de tanto movimiento, tanta gente, tantos lugares, tanto amor y tanta energía movilizada, lo único que me pedía (a gritos) el cuerpo era estar sola en mi casa con un matecito con coco y manzanilla (costumbres yuyeras que adquirí en mayo de Magu y Nahi, respectivamente) integrando todo lo vivido y recuperando mi batería social. Mi novio estaba de viaje esa última semana, así que estuve en casa prácticamente sin hablar con nadie, y lo necesitaba muchísimo. Necesitaba volver a mis horarios y mis comidas, ir a entrenar, lavar la ropa, cambiar las sábanas, encender mil sahumerios y sentir el reencuentro con mi rutina con la satisfacción de saber que la sigo eligiendo con cada fibra de mi ser. Ese tiene que ser uno de los mejores sentimientos del mundo: volver a casa, mirar alrededor y sentir un agradecimiento infinito por lo cotidiano. Te escribo ahora sobre el final de la última semana de mayo sintiendo una manta muy suavecita sobre mi regazo y escuchando el clac-clac-clac del teclado mecánico y la lluvia golpeando sobre la ventana del estudio. Se huele un sahumerio riquísimo que me trajo mi mamá de India y siento en la boca sabor a coco, manzanilla y yerba. Miro este espacio que construí y me llena la perfección absoluta de este momento presente, sintiendo, una vez más, que estoy exactamente donde tengo que estar: acá sentada, escribiéndote esta carta. Junio 2024: intuición El tema de este mes es la intuición. Permitirnos sentir sin darle tanta rosca a la mente, tan simple y tan complejo como suena. Esas veces que un fueguito adentro nos dice que sí, que es por ahí, aunque no lo entiendas del todo. Lo que estoy sintiendo ahora, lo que sentí en el retiro con las chicas, lo que me llevó a comprarme un pasaje a Aarhus sin mucha más razón que porque así lo sentí. Estoy dándole mucho más lugar a la intuición en mi vida, porque resulta ser una maravillosa co-directora junto con mi mente, quien solía ser la única CEO en esta compañía hasta hace no mucho tiempo atrás. Descubrí que cuando me guía exclusivamente la mente tiendo a sentirme abrumada, ansiosa, irritada y resentida, pero si le doy lugar a la intuición para que exprese su postura... ahí es cuando todo se acomoda y sucede la magia. Como habrás notado, el formato de esta carta cambió bastante (¡ahora hasta tiene nombre y loguito!) y no tengo más razones para esto que porque simplemente así lo sentí. Hasta el tema del mes fue muy intuitivo: me escribió Ayu, ilustradora y miembro de La Baum, contándome que soñó con un número que en numerología significaba "intuición", y sintió que podía ser algo para llevar al news y a La Baum. ¿Después de eso a vos te quedaría alguna duda de que este era el tema del mes? A mí tampoco. Intuición 🪄 Algunas semillas de intuición (plantá todas las que quieras) ✨ Una charla TED muy inspiradora sobre cómo usar a la intuición como tu algoritmo interno y puente hacia una humanidad más integrada. “Y si la lógica nos llevó a esta crisis climática y a una pandemia de salud mental" dice Jannine Barron, "seguramente necesitamos explorar nuevos paradigmas más restauradores y regenerativos. Paradigmas que abracen la intuición como un puente hacia el descubrimiento de una nueva forma de ser. Les prometo que la intuición los hará sentir más tranquilos y empoderados. Serán mejores líderes, mejores padres y todos seremos mejores antepasados." Ver la charla 🏔️ El corto “Your Mountain is Waiting”: Martha dejó de escuchar a su intuición y su vida está sufriendo las consecuencias. Cuando un encuentro muy extraño la obliga a ver las cosas de otra manera, le toca soltar y abrazar lo aparentemente irracional mientras emprende un viaje surrealista de descubrimiento y aprende a confiar en su intuición, una vez más. Es her mo sí si mo. Ver el corto 🎨 En ARoS, el museo de arte que visité en Aarhus, conocí la obra del pintor danés Richard Mortensen y quedé enamorada. Su acercamiento a la pintura es totalmente intuitivo, esforzándose por expresar la belleza que ve a su alrededor todos los días siguiendo su interior. Nunca fui muy fan del arte abstracto (oh sorpresa, niña mental) pero cuando me paré frente a su Botanisk portræt y me di cuenta de que tenía piel de gallina en la nuca, empecé a dudar de esa afirmación. 🌟 Esta ilustración de la gran Pepita Sandwich como recordatorio de hacia dónde ir cuando sintamos que perdemos el norte. Brújula interna Algunas preguntas sobre la intuición para invitarte a mirar al pasado, presente y futuro: Postales desde el bosque Este mes estreno una sección colaborativa en el newsletter: las postales desde el bosque. Le propuse a los miembros de La Baum que, si tenían un mensaje positivo de amor para compartir con vos, podían hacerlo enviándome una postal física a Berlín. ¡No te explico la emoción cuando encontré la primera en el buzón! Cada mes voy a elegir una postal y compartir el mensaje con vos, para que te llegue a donde quiera que estés. Esta primer postal la envía María Luisa desde Barcelona, España, y la imagen es una foto sacada por ella misma, en el bosque: Este mes en La Baum vamos a dejarnos llevar por la intuición. El foco este mes está puesto en darle lugar a la intuición en nuestro universo creativo: una misión de blackout poetry inspirada en Austin Kleon, un debate sobre el libro Untamed de Glennon Doyle y un taller para descubrir tu propósito con Guada, veterinaria y coach profesional. Desde el Open Camp se sumaron casi 30 caras nuevas a La Baum, así que si tu miedo es ser "la persona nueva" no te preocupes: ¡Hay un montón de caras nuevas! Ir a La Baumhaus 🏡 Cartelera de novedades 📌 Abro convocatoria para mi programa de mentoría y acompañamiento de proyectos para arrancar en Julio. Si querés saber más, entrá a mi web. Y si resuena lo que ves, escribime :) 📌 Por una semana estoy abriendo las puertas de mi curso de hábitos y planificación y mi curso de videos sensibles. Me estuvieron preguntando mucho por los dos últimamente, y como solo los abro una o dos veces por año, decidí romper la estructura un ratito (porque intuición, that's why) y abrir inscripciones a ambos por 7 días. Si querés saber más y anotarte, te dejo los links: Y, si te gustan los dos, creé un bundle que incluye ambos juntos a un precio promocional (psst: si estás en La Baum, pedime descuento) ¡Eso es todo por este mes! Si te reenviaron este newsletter podés suscribirte acá. Si querés seguirme en Instagram podés hacerlo acá. Si querés leer ediciones anteriores, encontrás todo 2020 y 2021 compilado en las Bitácoras I y II. Y si querés recomendar este news, te lo agradezco muchísimo. Gracias por recibir esta carta, significa un montón. Nos leemos el mes que viene 🫶🏻 |
Este newsletter es una cajita de herramientas creativas, envuelta en forma de carta de una amiga.
Si queres poner una canción de fondo mientras leés esta carta, te recomiendo Old Pine de Ben Howard Hola Reader, ¿Cómo estás? ¡Te saludo por primera vez como una Señora Casada! ✨ Todo el mundo me pregunta "¿Y? ¿Cómo viene la vida en matrimonio?" en chiste, porque saben que es la misma vida de siempre: la misma pareja que hace 5 años, la misma casa en la que convivimos hace 4 y el mismo amor, pero ahora con un anillo. Y eso es en gran parte verdad, aunque también hay algo que siento muy...
Si queres poner una canción de fondo mientras leés esta carta, te recomiendo We Can't Stop (de Miley Cyrus pero cantada por Boyce Avenue y Bea Miller porque it's our party and we can do what we want) Hola Reader, ¿Cómo estás? Yo muy bien, en este momento escribiéndote desde un cafecito en Londres mientras disfruto de un blueberry muffin y un flat white con leche de avena. Vinimos con Bruno una semana y nos estamos quedando en el departamento de una pareja, que a la vez se está quedando en...
Si queres poner una canción de fondo mientras leés esta carta, te recomiendo Window to the Sky de Kim Churchill Hola Reader, ¿Cómo estás? Yo bien, en este momento escribiéndote desde un espacio de coworking a pasitos de la estación central de Berlin. Cada tanto me gusta venir a trabajar acá para cambiar de ambiente o cuando necesito concentrarme en tareas específicas (como escribirte esta carta). Hace poco además descubrí que puedo usar el ipad de segundo monitor (suena obvio ahora pero nunca...